Los ladridos son un problema que afecta al animal y a los que conviven con él. Para solucionar el problema del ladrido de un perro se necesitará saber por qué ladra y, por supuesto, mucha paciencia. Los canes pueden ladrar por diversas razones y es vital entender su ladrido para poder enseñarle a no hacerlo. Hay que educar a un perro para que controle los ladridos, tan solo hay que encontrar el método más adecuado para cada caso. Descubre cómo hacer que un perro no ladre en este artículo del blog de perros.
Mi perro ladra mucho
¡Descubrir es lo primero! Por ejemplo, muchos de los perros pasan demasiadas horas solos o encerrados, entonces cuando regresamos a casa es normal que puedan ladrar frenéticamente. Otra opción es que su ladrido nos esté advirtiendo de algo o lo haga porque le duele algo, por miedo, por querer jugar… El asunto es que en otras ocasiones lo hacen por el hecho de ladrar. También es necesario mencionar que los cachorros, cuando ladran, puede que sea por inseguridad después de haberle sacado de su manada y haberle metido en una familia humana. Como ves hay múltiples razones que llevan a un perro a sentir la necesidad de ladrar, por lo que saber cuáles son las causas es esencial. Hemos de conocer de manera adecuada las soluciones en función del problema. Sigue leyendo este artículo para saber cómo hacer que un perro no ladre por ladrar.
Perro que ladra mucho
También hay que tener presente que cada perro es un mundo y que no todos los consejos que se van a mencionar en este post del blog de perros pueden funcionar siempre. Si la situación es realmente grave, acude a un especialista. Este profesional detectará perfectamente las causas y nos aconsejará correctamente qué técnica aplicar.
Tratar de descubrir la causa del ladrido excesivo
Repasemos las principales causas de ladridos excesivos en perros:
- Estrés. Hay que tener presente que el ladrido de nuestro perro es una forma de comunicación, por lo que solo ladrará si tiene que decirnos algo. De modo que antes de nada, revisa que las necesidades de tu perro estén cubiertas: rutinas de paseo, alimentación, libertad y juegos contigo. Si alguna de sus necesidades básicas no está siendo cubierta puede que nuestro perro esté tratando de liberar el estrés acumulado. En condiciones de estrés máximo puede que su única vía de escape para liberar la tensión sea utilizar el ladrido.
- Soledad. Estilo de vida actual hace que muchos dueños estemos obligados a tener que pasar la mayor parte del día fuera de casa por trabajo. Esto se traduce en que nuestro perro pasará muchas horas solo en casa. Es vital que tengas tiempo para dedicarle a tu perro, organización una rutina para pasar tiempo con él. Los perros son animales sociales, necesitan comunicarse e interactuar constantemente con su entorno y más si se trata de perros muy activos.
- Ansiedad por separación. Relacionada con las dos causas arriba mencionadas, es una de las principales causas del ladrido. Muchos son los perros que ladran de forma continuada hasta que sus dueños vuelven a casa y otros canalizan la ansiedad por separación mordiendo los muebles. Para combatir la ansiedad por separación, muchos dueños utilizan juguetes interactivos
- Mala socialización. ¿Tu perro ladra si ve bicicletas o la presencia de alguien? En perros adultos este comportamiento es muy difícil de corregir. De hecho, lo mejor será buscar un buen etólogo canino o adiestrador.
- Frustración. En este caso hablamos del ambiente, ¿tu perro tiene espacio para jugar, dormir o correr? Nuestro can necesita pasar las horas, explorar, tener su espacio propio poder hacer “su vida” tranquilamente.
- Genética o herencia. Sí, debemos asumir que hay ciertas razas que son más ladradoras por naturaleza. Estas son: yorksihire terrier, schnauzer pequeño, chihuahua, pequinés, fox terrier, beagle o cairn terrier… Y es que, determinadas razas de perros condicionadas por la genética, propician esta actitud. Como puedes comprobar es habitual en perros chihuahua o de raza pequeña pero también en algunos perros cazadores.
- Territorialidad. ¿Tu perro ladra cuando llegan invitados o cuanto tocan el timbre? Si tu perro ladra en estas ocasiones, debes saber que es una actitud de vigilancia propia. Un par de ladridos son normales.
- Ladridos asociados a la vejez. Con la edad algunos perros pierden capacidades auditivas o de visión, por eso motivo pueden ladrar. También para expresar dolores articulares asociados a la edad. Mencionar que estos perros ancianos necesitan un cariño y paciencia especial debido a su condición.
- Entusiasmo. Hay perros que se emocionan y no pueden evitar ladrar ante algunos estímulos. En estos casos procuraremos premiar actitudes tranquilas.
- Miedos. Puede ser que algunos perros hayan experimentado vivencias traumáticas y tienen miedo a determinadas situaciones. Es fundamental tratar con paciencia estos casos y comprender que el animal solo está ladrando para protegerse de aquello que considera “peligroso”.
- Adiestramiento inconsciente. ¿Qué significa esto? Pues que en ciertas situaciones, sin querer, premiamos ladridos de nuestra mascota. Entonces, el problema aparece cuando nuestro perro lo utiliza constantemente para pedir sus premios y descontrola el ladrido generalizándolo en lugar de utilizarlo para situaciones concretas.
- Problemas con otros perros. La clave para evitar estos ladridos, es identificar correctamente la causa que lo está provocando. Si la actitud que tiene es agresiva, es mejor directamente acudir a un profesional.
- Falta de rutina de ejercicios. Los perros que no descargan toda su energía se vuelven destructores y sufren trastornos como ladrar sin parar, lamerse hasta lastimarse…
Trucos para hacer que tu perro no ladre tanto
- Asegúrate de que tu perro tiene comida, bebida y un espacio confortable.
- Pasea mucho y juega con él antes de dejarle solo en casa.
- Déjale juguetes interactivos rellenos de premios.
- No le regañes. Este tipo de actitud solamente empeorarán el comportamiento.
- Si ladra por la calle cuando se cruza con otros perros, buscaremos normalizar la situación. Seguiremos con una actitud tranquila, procurando que nuestro perro también la tenga.
- Puedes distraerle con golosinas cuando aparezca el estímulo que provoca su ladrido. Si ves que no hay forma, procura marcharte del lugar.
- Buscar paseos tranquilos.
- No fuerces el contacto o la interacción con otros perros o personas si no lo desea, cuando él esté preparado ya avanzará e intentará relacionarse.
- Seguir las pautas diariamente.
- Jamás debemos utilizar collares estranguladores o con descargas.
- Potenciar la tranquilidad del animal. Cuando se encuentre tranquilo y relajado, es bueno acariciarlo suavemente.
- Las órdenes y los comandos funcionan. Siempre puedes darle la orden de “no”.
Trucos para que un perro no ladre
- Calmar ladridos de inseguridad. En este caso lo hacen porque consideran que el dueño no domina la situación, por lo que debemos transmitir confianza.
- Ladridos de frustración y aburrimiento. En estos casos busca atención. Plantéate si juegas con tu mascota y le das la atención que merece.
- Ladridos de dolor. Lo más recomendable es visitar al veterinario. Esta es la única manera de descartar que la naturaleza del ladrido sea una dolencia física.
- Mi perro ladra en los paseos. En el momento en el que os crucéis con alguien, continúa caminando tranquilamente sin tener ningún tipo de reacción. Lo que se trata de es de que tu perro obtenga esa seguridad necesaria y que se de cuenta que los ladridos no son útiles.
- Ladridos por soledad. Afortunadamente existen muchas soluciones para este problema, desde crear una rutina (paseos largos) hasta intentar despedirte brevemente. No dando mucha importancia. Lo mismo que cuando vuelvas a casa, espera a que se calme para acariciarlo.
- Ladridos por entusiasmo. ¡Fácil! Habrá que premiarlo cuando esté relajado y buscaremos tranquilizarle, acariciándolo y masajeándole.
- Ladridos por predisposición genética. ¿La solución? Premiar comportamientos sosegados.
- Ladridos por adiestramiento involuntario. Entonces, utilizar otro tipo de premios que no sean chuches, pro ejemplo acariciarlo.
- Ladridos en perros ancianos. En estos casos debemos ser comprensivos con nuestras mascotas. Habrá que mantener una rutina de ejercicios sencillos y estimulación mental.
- Ladrar por miedo. La acupuntura o la aromaterapia (como las flores de Bach) pueden ser una vía más natural de tratar y calmar al perro, a la par que hacerle sentir seguro y a gusto.
Enseñar a un cachorro a no ladrar
Los pasos a seguir en cachorros son muy diferentes. No obstante, recuerda que no tienes que frenar el ladrido de tu cachorro si estos son señal de que le ocurre algo, si es por una señal de alarma o porque te está avisando de un peligro.
- Deja de mirarlo cuando ladra.
- Una vez que deje de ladrar, prémiale. En la siguiente, alarga el tiempo que debe estar sin ladrar antes de darle una nueva recompensa.
- Trabaja el silencio. ¿Cómo? Varía la cantidad de tiempo en silencio y prémiale cuando esté relajado.
- Retirar la motivación que le hace ladrar. Para enseñar a un cachorro a no ladrar es importante que vigiles tu actitud. Si tu perro consigue algún tipo de recompensa cuando ladra seguirá haciéndolo.
- Haz caso omiso a los ladridos. No hagas caso de los ladridos de tu perro a no ser que tengan algún propósito. Es necesario que no le hagas caso en un tiempo determinado para enseñarle a no ladrar.
Comportamientos de los propietarios que refuerzan los ladridos
- Hacerle callar cuando está ladrando. De esta manera entenderá que consigue tu atención ladrando.
- Acariciarlo. Si acaricias tu perro cuando está ladrando entenderá que te gusta que ladre y el comportamiento se irá en incremento.
- Gritarle. Si gritas, puede que deje de ladrar en las primeras ocasiones al sorprenderte. Pero se acostumbrará a tus gritos y seguirá ladrando.
Adiestrar a un perro para que no ladre cuando suene el timbre, el teléfono o la puerta
Ante todo, debes saber que el ladrido es un comportamiento natural de protección con su familia (manada). Casi todos los perros se excitan cuando llaman a la puerta y para enseñar a que dejen de comportarse así es importante entenderlos. Lo que debemos hacer es desensibilizarlo al sonido: haz que suene el teléfono o el timbre e ignóralo. Repite esto varios días; verás que tu perro empieza a ladrar y luego se “desconcierta” por tu falta de reacción. Si se queda tranquilo sin ladrar, elógialo. Pero si ladra, ignóralo y no le prestes ningún tipo de atención, ni con palabras ni contacto visual.
Enseñar a mi perro a no ladrar
El ladrido es un mecanismo muy común en nuestros canes para expresar sus emociones y comunicarse. Los perros nunca ladran por molestar, sino porque necesitan algo. Para saber por qué ladra tu perro, es necesario aprender a interpretar los diferentes tipos de vocalizaciones que utilizan.
Resumen del post sobre trucos para que un perro no ladre
Causas de un ladrido excesivo
- Estrés.
- Soledad.
- Ansiedad por separación.
- Mala socialización.
- Frustración.
- Genética o herencia.
- Territorialidad.
- Ladridos asociados a la vejez.
- Entusiasmo.
- Miedos.
- Adiestramiento inconsciente.
- Problemas con otros perros.
- Falta de rutina de ejercicios.
Trucos para que un perro no ladre
- Calmar ladridos de inseguridad. Demostrar que dominamos la situación.
- Ladridos de frustración y aburrimiento. ¿Prestas la atención que se merece?
- Ladridos de dolor. Lo más recomendable es visitar al veterinario.
- Mi perro ladra en los paseos. Procura caminar por sitios poco concurridos.
- Ladridos por soledad. Rutina y caricias.
- Ladridos por entusiasmo o por predisposición genética. Premiar el comportamiento sosegado.
- Ladridos por adiestramiento involuntario. Entonces, utilizar otro tipo de premios que no sean chuches, pro ejemplo acariciarlo.
- Ladridos en perros ancianos. Habrá que mantener una rutina de ejercicios sencillos y estimulación mental.
- Ladrar por miedo. La acupuntura o la aromaterapia pueden ayudarnos.