La depresión, una enfermedad estudiada y clasificada en medicina humana. Sin embargo, en veterinaria se conoce mucho menos al respecto, pero sí, la depresión en perros existe. Sí, al igual que las personas, los perros también se pueden deprimir. Desafortunadamente, la depresión es un trastorno muy común hoy en día. En este post del blog de perros queremos hablar de la depresión en perros, la cual no es tan diferente de la humana. Una enfermedad, la soledad o aislamiento excesivo, un cambio importante en su rutina habitual, la llegada de un nuevo miembro a la familia o la pérdida repentina son situaciones que pueden generar una profunda tristeza a nuestros mejores amigos perrunos, generándoles estrés canino, ansiedad y altos estados depresivos que es necesario atajar cuanto antes.
Depresión canina
Empezaremos mencionando que al contrario de lo que ocurre en medicina humana, en veterinaria no se dispone de datos concretos obtenidos en poblaciones grandes que definan los criterios diagnósticos requeridos para establecer la existencia de depresión.
La depresión en perros
La depresión en perros, al igual que en los humanos, se trata de un desorden mental caracterizado por una baja autoestima y falta de interés en las actividades cotidianas, que impiden llevar una vida normal. Se podría mencionar que hay dos tipos: la reactiva (ocurre como respuesta a un evento negativo concreto) y la endógena (en la que no podemos identificar un evento negativo desencadenante).
Causas de la depresión en perros
Estas son algunas de las causas de depresión canina más comunes.
- Soledad o aburrimiento. Producida por la desatención de su tutor, por estar muchas horas solo en casa, por no jugar o interactuar….
- Pérdida de un ser querido. Cuando una mascota pierde a un miembro de la familia con quien pasaba mucho tiempo, su estado de ánimo cambia. En estos casos es vital intentar hacer las mismas actividades que realizaba con la persona que ya no está.
- Sensación de reemplazo. La llegada de un bebé o una nueva mascota puede hacer sentir a nuestra mascota que está siendo reemplazado. Importante mostrarle que es uno más y crear un vínculo, fomentando la convivencia.
- Enfermedades. ¿Tu perro sufre algún tipo de enfermedad? El hecho de no estar al cien por cien en su vida como antes, puede derivar en una gran tristeza y depresión.
- Cambio de hogar o familia. Con cualquier de los dos cambios, el animal debe adaptarse y, suele ser un proceso largo.
- Situaciones desagradables. Cualquier situación que les genere miedo y ansiedad, puede hacer que nuestro perro cambie su comportamiento. Aunque, generalmente, la depresión en estos casos suele ser pasajera, pueden arrastrar miedos e inseguridades.
Síntomas de la depresión en perros
De acuerdo con The American Society of Animal Behavior, la depresión en los perros tiene síntomas similares a la depresión en los seres humanos. Algunos signos clínicos, presentes en los seres humanos con este tipo de trastornos pueden aplicarse también a la depresión en perros, pero deben ser interpretados en el contexto adecuado.
- Observamos cambios en su conducta.
- No sale a recibirnos cuando llegamos a casa.
- Pérdida de apetito o trastornos alimenticios.
- Duerme en exceso. Se siente somnoliento casi todo el día.
- Pérdida de interés por sus rutinas diarias y su entorno.
- No le apetece jugar ni interactuar con las personas que le rodean.
- Aúlla o gime a menudo sin motivo.
- Se muestra poco afectivo.
- Se esconde debajo de las mesas y siempre está huidizo.
- Se lame mucho las patas. Te dejamos un artículo interesante: ¿Por qué los perros se lamen las patas constantemente?
- Hacer pis o caca dentro de casa, en vez de pedir salir a la calle.
- Cola caída o falta de movimiento de esta.
Identificar cuándo un perro padece depresión no es tarea sencilla, bien sea porque no se consideran relevantes las manifestaciones y cambios en su comportamiento o porque erróneamente pensamos que lo único que busca es llamar nuestra atención. Por ello, es importante que, si notas algunos de estos signos en tu perro, acudas a tu veterinario para que este profesional trate lo que le sucede y mejore la salud emocional de tu perro.
Tratamiento de la depresión en perros
Lamentablemente, los perros no nos pueden decir exactamente cuál fue la causa que lo deprimió, tendremos que intuir nosotros cuando sucede y acudir a nuestro veterinario para la depresión de tu perro. La mayoría de los perros deprimidos se recuperan a los pocos días o semanas, incrementando los cuidados y atenciones. Los tratamientos por antidepresivos son agresivos y deben utilizarse solo como último recurso, siempre que nuestro veterinario lo prescriba. Lo mejor para el tratamiento de la depresión en perros es intentar detectar lo que le causa ese estado y solucionarlo eliminando ese estímulo negativo, dándole atenciones y cariño.
¿Cómo animar a tu perro si sufre depresión?
- Para tratar adecuadamente la tristeza de tu perro y que no acabe convirtiéndose en un problema crónico es fundamental identificar muy bien la causa que lo provoca.
- Los perros afectados deben ser estimulados (no forzados) a participar en aquellas actividades que previamente les resultaban agradables y que han dejado de resultarles atractivas como consecuencia de la depresión.
- Al mismo tiempo, es importante evitar aquellas situaciones que le causan angustia o miedo.
- Debes cubrir sus necesidades básicas de comida, agua e higiene. Tu perro debe sentirse confortable en su hogar y libre de cualquier sufrimiento.
- Dedícale tu tiempo. Es importante que te sienta cerca.
- Evita el aburrimiento. Si sabes que va a estar solo en casa mucho tiempo, deja a su alcance juguetes y mordedores.
- Dar buenos paseos, al menos tres veces al día. Estos paseos servirán para que tu perro se estimule con el entorno y se ejercite.
- Haz que se sienta a gusto. Proporciónale un lugar agradable donde se sienta seguro.
- Consulta con tu veterinario ante cambios de rutina muy drásticos. En el caso de no haber dado con el problema que provoca su depresión es muy importante acudir a su veterinario de confianza.
La depresión canina
La depresión canina
La depresión en perros, al igual que en los humanos, se trata de un desorden mental caracterizado por una baja autoestima y falta de interés en las actividades cotidianas, que impiden llevar una vida normal. Existen dos tipos: la reactiva (ocurre como respuesta a un evento negativo concreto) y la endógena (en la que no podemos identificar un evento negativo desencadenante).
Listado de causas de la depresión canina
- Soledad o aburrimiento.
- Pérdida de un ser querido.
- Sensación de reemplazo.
- Enfermedades.
- Cambio de hogar o familia.
- Situaciones desagradables.
Listado de síntomas de la depresión en perros
- Observamos cambios en su conducta.
- No sale a recibirnos cuando llegamos a casa.
- Pérdida de apetito o trastornos alimenticios.
- Duerme en exceso. Se siente somnoliento casi todo el día.
- Pérdida de interés por sus rutinas diarias y su entorno.
- No le apetece jugar ni interactuar con las personas que le rodean.
- Aúlla o gime a menudo sin motivo.
- Se muestra poco afectivo.
- Se esconde debajo de las mesas y siempre está huidizo.
- Se lame mucho las patas.
- Hacer pis o caca dentro de casa, en vez de pedir salir a la calle.
- Cola caída o falta de movimiento de esta.