El gluten es una proteína que se encuentra en alimentos como el trigo, la avena (existen variedades de avena consideradas sin gluten, artículo: ¿es buena la avena para perros?), la cebada, la espelta o el centeno y los perros, al igual que las personas, pueden ser intolerantes a él. Cualquier alimento que contenga estos cereales, aunque sea en forma de trazas, también puede decirse que tiene gluten. Aunque la mayoría de los perros toleran bien todos los alimentos, al igual que ocurre con las personas, existen perros celíacos. ¿Quieres saber cuáles son los síntomas, diagnóstico y tratamiento de los perros intolerantes?
Perros intolerantes al gluten
Tal y como apunta la Federación de Asociaciones de Celíacos de España (FACE), la enfermedad celíaca (EC) es una patología multisistémica con base autoinmune, es decir, que puede afectar no solo al aparato digestivo y que en ella interviene el sistema inmunitario. Es este el que, al detectar la presencia de gluten en el organismo, reacciona dañando la mucosa del intestino y destruyendo sus vellosidades, que se encargan de absorber los nutrientes necesarios. En el caso de los cánidos, la celiaquía tiene factor genético y el samoyedo y el setter irlandés son más propensos a sufrirla. No es común encontrarse a perros celíacos, pero existe un porcentaje pequeño que lo son.
¿Qué es un perro celíaco?
Un perro sensible o con intolerancia al gluten significará que, cada vez que consuma algún alimento que contenga esta proteína, su estómago no podrá digerirlo bien, haciendo que se produzcan lesiones en las vellosidades intestinales. Esto le puede acarrear una inflamación crónica en el intestino u otros problemas graves.
Intolerancia alimentaria o alergia
Es importante diferenciar una intolerancia alimentaria de la alergia. En el caso de alergia a algún alimento, el cuerpo reacciona ante la ingesta de ese alimento. Al hablar de intolerancia es que el cuerpo no está preparado para digerir ese alimento y si lo ingiere de forma reiterada es cuando el organismo empieza a deteriorarse pudiendo acarrear problemas importantes a largo plazo. También hay que diferenciar la intolerancia al gluten de otras respuestas del organismo ante determinados alimentos que consideramos prohibidos.
¿Qué razas de perros son más propensas a sufrir intolerancia al gluten?
Como hemos comentado, la enfermedad celíaca se da en individuos que son susceptibles de padecerla genéticamente. Es por eso que determinadas razas como el Setter Irlandés, el Samoyedo y el Border Terrier son más propensas, pero por supuesto, no son las únicas.
¿Cómo detectar a los perros celíacos?
Si tu peludo ingiere alimentos que contienen gluten, sufrirá inflamación e irritación en su sistema digestivo haciendo que los nutrientes no se absorban correctamente. Esto derivará en claros síntomas de problemas digestivos. Principalmente podrás ver que sufre vómitos y diarrea (a menudo con moco) lo que dará lugar a una desnutrición con pérdida de peso, debilidad general y cansancio. Ante el primer signo de intolerancia alimenticia es fundamental acudir al veterinario para que haga las pruebas pertinentes y, una vez tenga el diagnóstico, decida el mejor tratamiento para el animal. De no tratarse a tiempo la intolerancia a tiempo, la salud del animal puede verse realmente comprometida. La mala absorción de nutrientes de forma prolongada puede afectar órganos importantes como el corazón, el hígado o el sistema nervioso.
La enfermedad celíaca no es fácil de diagnosticar, ya que los síntomas pueden variar mucho de un perro a otro. A veces se tarda bastante tiempo en diagnosticar a los perros celíacos porque son tratados para otras patologías.
Diagnóstico de perros celíacos y tratamiento
Un especialista explorará al animal y realizará las pruebas pertinentes para confirmar si sufre dicha intolerancia o cualquier otra. El veterinario solicitará análisis de heces, sangre, orina e, incluso, radiografías. Si el veterinario no encuentra nada en las analíticas y descarta la posibilidad de otras enfermedades subyacentes, entonces, para poder determinar si el perro tiene intolerancia al gluten va a bastar con eliminar completamente la ingesta de alimentos con gluten durante algunas semanas. Si los síntomas comienzan a desaparecer y el perro se encuentra mejor, entonces se considera que se trata de la enfermedad celíaca.
Tratamiento para los perros celíacos
La celiaquía es una enfermedad compleja para la cual no existe cura. En la mayoría de las ocasiones, los perros ni siquiera necesitan tomar medicamentos. Pero, eso sí, hay que ser muy cuidadosos con los alimentos que consume el animal, incluyendo los premios a los que habrá que cerciorarse que no contienen gluten.
Consecuencias de la enfermedad celíaca
Como hemos explicado, la enfermedad celíaca no afecta solo del aparato digestivo, sino que puede afectar a cualquier otro sistema. De no tratarse a tiempo la intolerancia, la salud del animal puede verse seriamente comprometida.
Es importante recordar que la celiaquía no se trata solo del aparato digestivo, sino que puede verse afectado cualquier otro sistema. Y aunque se trata de una enfermedad idiopática, hay estudios que sostienen que existen factores genéticos que contribuyen al desarrollo de la enfermedad celíaca.
