El soplo cardíaco en perros se detecta cuando se escucha un sonido anormal en el corazón, durante un examen físico. Este ruido puede variar en intensidad y tono, y puede ser un indicador de un flujo sanguíneo turbulento en el corazón, debido a varias razones, como válvulas cardíacas defectuosas, problemas en las arterias, defectos en las paredes del corazón, flujo sanguíneo anormal o enfermedades congénitas. Los síntomas incluyen tos, debilidad y encías grises. El diagnóstico se realiza a través de auscultación y pruebas como radiografía y ecocardiografía. El tratamiento varía según la gravedad y causa subyacente, incluyendo medicación y cambios en la alimentación. Es importante detectar y tratar a tiempo para mejorar la calidad de vida de tu perro.
¿Qué es un soplo cardíaco?
Cuando hablamos de soplo, nos referimos a un sonido anormal detectado en la auscultación cardíaca. El corazón de nuestras mascotas es muy similar al nuestro. Está formado por cuatro cámaras: dos atrios (comúnmente conocidos como aurículas) y dos ventrículos, que se encuentran comunicados entre sí por medio de válvulas (mitral en el lado izquierdo y tricúspide en el lado derecho). La sangre, a su paso por el corazón, sigue un circuito, y va pasando de una cámara a otra a través de válvulas que se abren y se cierran y que se encargan de que la sangre siga un camino hacia delante cuando el corazón se contrae y no vuelva hacia atrás.
Cuando el corazón está sano, al auscultarlo en la consulta, solo se escuchan los latidos del corazón. Cuando el flujo es turbulento (desigual), se genera una vibración audible que es conocido como soplo. Este ruido puede ser causado por varias razones, como la presencia de un flujo sanguíneo anormal, una válvula cardíaca dañada o una malformación en el corazón. El veterinario podrá detectar el soplo cardíaco al perro en una revisión de rutina, al auscultar su corazón con un estetoscopio. La ecocardiografía, una ecografía del corazón, puede realizarse para confirmar e identificar el estadio. Un soplo en el corazón de un perro es una afección cardíaca que puede afectar a perros de todas las razas y tamaños.
Soplo en el corazón de un perro
Los soplos en el corazón de los perros pueden clasificarse en diferentes grados, dependiendo de su intensidad. Los grados van desde el grado 1, que es el más leve, hasta el grado 6, que es el más grave. Un soplo de grado 1 es apenas audible, mientras que un soplo de grado 6 puede ser escuchado sin necesidad de un estetoscopio.
¿Todos los soplos se escuchan igual?
No, se emplea este sistema para clasificar los soplos en función de la intensidad o del volumen del sonido, siendo 1 el menos audible y 6 el más intenso. Sin embargo, este sistema no guarda relación con la severidad de la situación, solo sirve para caracterizar el soplo. Desde el grado 1 (muy suave) hasta el 6 (muy fuerte). Los grados 1 y 2 suelen ser más benignos, mientras que los grados 3 o superiores pueden indicar un problema cardíaco más grave.
Impacto en la vida diaria de un perro con soplo de corazón
Como cualquier enfermedad, su efecto diario depende en gran medida de la gravedad y de su causa subyacente. Por ejemplo, los de grado 1 o 2 pueden no tener un impacto significativo en la calidad de vida de nuestra mascota y no requerir tratamiento. Sin embargo, los de grado 3 o superiores pueden ser más preocupantes y necesitar una atención más intensiva.
¿Existen diferentes tipos de soplos?
Sí, a continuación, os contamos en qué consiste cada uno:
- Soplos inocentes: aquellos que se producen en pacientes sanos y que no tienen consecuencias para la mascota. Pueden ser permanentes o temporales. En cachorros a veces se detectan soplos que pueden indicar una enfermedad congénita, pero muchos de ellos presentan soplos inocentes que desaparecen sobre los 4 meses de edad.
- Soplos funcionales: son aquellos que se producen por una alteración en el flujo de la sangre pero que no están asociados a una enfermedad cardiaca. Suelen ser más fuertes que los anteriores y se suelen escuchar en mascotas taquicárdicas, anémicas, con fiebre…
- Soplos patológicos: aquellos que sí están asociados a una enfermedad cardíaca. Se producen por ejemplo cuando las válvulas no funcionan correctamente o hay una obstrucción del flujo de la sangre.
Causas del soplo cardíaco en perros
La mayoría de los soplos están producidos por una enfermedad cardiaca que produce una alteración del flujo de la sangre por el corazón. Sin embargo, no todas las enfermedades cardiacas producen un soplo y, aunque hoy no hablemos de ella, es importante saberlo. Algunos soplos pueden ser temporales o fisiológicos (es decir, no están producidos por ninguna enfermedad). Cuando se detecta un soplo en el corazón de los perros más jóvenes este suele deberse a una enfermedad cardíaca congénita. Las causas más comunes son:
- Deficiencias de las válvulas cardíacas (valvulopatías). Las deficiencias en las válvulas cardíacas pueden generar turbulencias en el flujo sanguíneo, lo que provoca el soplo cardíaco en los perros. Estas deficiencias pueden incluir: estenosis valvular, insuficiencia valvular y prolapso de la válvula mitral.
- Miocardiopatías y defectos en las paredes del corazón. Los defectos en las paredes del corazón, como las comunicaciones interventriculares o interauriculares, pueden alterar el flujo sanguíneo y dar lugar al soplo cardíaco en los perros.
- Anormalidades en la viscosidad y velocidad del flujo sanguíneo. Las anormalidades en la viscosidad y velocidad del flujo sanguíneo, como la anemia o la policitemia, pueden causar turbulencias en el corazón y ocasionar un soplo cardíaco en los perros.
- Miocardiopatías, enfermedad del gusano del corazón, endocarditis y tumores. Otras causas menos comunes del soplo cardíaco en perros incluyen miocardiopatías, enfermedad del gusano del corazón, endocarditis y tumores cardíacos, que también pueden alterar el flujo sanguíneo y producir el sonido característico del soplo.
Síntomas del soplo cardíaco en perros
El soplo cardíaco en perros puede manifestarse a través de varios síntomas que indican posibles patologías cardíacas. Es crucial estar atentos a estos signos para poder brindar un adecuado cuidado a nuestra mascota. Tanto los animales como las personas pueden sufrir soplos y dolencias cardíacas sin sentirse enfermos, ya que el corazón puede seguir desempeñando su labor.
Mencionar que los soplos cardíacos en sí no producen síntomas, pero suelen constituir indicios de patologías cardíacas de diversa gravedad, las cuales sí son susceptibles de manifestar síntomas. Cómo hemos dicho al principio: no hay síntomas visibles, nada que tú puedas detectar observando a tu peludo. En ocasiones nuestras mascotas pueden no presentar ninguna sintomatología, ya que el soplo en sí no produce sintomatología, la produce la enfermedad que provoca el soplo. Si el soplo se detecta antes de que se hayan producido signos, debe estar atento en caso de que aparezcan:
- Tos, dificultad para respirar y tolerancia al ejercicio reducida. El primer síntoma que puede llamar nuestra atención es la presencia de tos persistente en nuestro perro. Esta tos puede ser seca o productiva y está asociada con la acumulación de líquido o edema en los pulmones. Además de la tos, es común que el perro presente dificultad para respirar, respiración rápida o disnea, especialmente después de hacer ejercicio. También podemos notar que su tolerancia al ejercicio se ve reducida, ya que se cansará más rápido de lo habitual.
- Debilidad, letargo y desmayos. En casos más severos, el perro puede experimentar debilidad generalizada y letargo. Esto se debe a que el corazón no está bombeando suficiente sangre y oxígeno al resto del cuerpo de manera eficiente. Estos síntomas pueden empeorar cuando el perro se agita o se esfuerza. Incluso, en situaciones extremas, el perro puede llegar a desmayarse debido a la falta de oxígeno en el cerebro.
- Encías grises o azules y distensión abdominal. En algunos casos, el flujo de sangre deficiente puede provocar cambios en el color de las encías del perro. Podemos notar que las encías se vuelven grises o incluso azules, lo que indica una falta de oxígeno en el sistema circulatorio. Además, podemos observar una distensión abdominal o hinchazón en el perro, debido a la acumulación de líquido o gases.
Ante la presencia de estos síntomas, es fundamental acudir a un veterinario para un diagnóstico preciso y un adecuado tratamiento. La detección temprana y el manejo adecuado del soplo cardíaco en perros pueden contribuir a mejorar su calidad de vida y prolongar su esperanza de vida.
Diagnóstico del soplo cardíaco en perros
Los soplos cardíacos pueden ser de distinta intensidad, clasificándose en 6 grados: 1 es el más leve y 6 el más intenso. Pueden apreciarse con más intensidad en determinadas zonas de la caja torácica, dependiendo del punto del corazón donde tengan su origen, así como en distintos períodos del ciclo de contracción del músculo cardíaco. El diagnóstico del soplo cardíaco en perros se realiza a través de un examen físico completo y una cuidadosa auscultación del corazón por parte del veterinario. Durante el examen, el veterinario escuchará atentamente cualquier sonido anormal, como un soplo cardíaco, utilizando un estetoscopio. Este paso inicial es crucial para detectar la presencia del soplo y determinar su ubicación y características.
Examen físico y auscultación del corazón por parte del veterinario
En el examen físico, el veterinario evaluará el estado general de salud del perro, revisando sus signos vitales, su comportamiento y cualquier síntoma presente. Luego, procederá a la auscultación del corazón, escuchando cuidadosamente los sonidos cardiacos normales y cualquier sonido anormal o soplo.
El veterinario utilizará un estetoscopio para escuchar los sonidos del corazón en diferentes puntos del tórax, prestando especial atención a los diferentes campos valvulares. Dependiendo de la ubicación y características del soplo, el veterinario podrá determinar qué válvula o estructura cardiacas pueden estar involucradas y realizar una evaluación inicial de la gravedad del soplo.
Pruebas complementarias: radiografía de tórax y ecocardiografía
Para complementar el examen físico y obtener más información precisa sobre el corazón del perro, se suelen realizar pruebas de imagen. La radiografía de tórax es una de las pruebas más comunes utilizadas en el diagnóstico del soplo cardíaco. Esta imagen radiográfica permite visualizar el tamaño y la forma del corazón, así como detectar posibles anomalías en los pulmones o el sistema circulatorio.
Otra prueba clave es la ecocardiografía, la cual proporciona una imagen detallada y en tiempo real del corazón y sus estructuras. Este estudio utiliza ultrasonidos para evaluar la anatomía y el funcionamiento del corazón, permitiendo detectar posibles anomalías en las válvulas, las paredes y las cavidades cardiacas. La ecocardiografía es especialmente útil para determinar la causa exacta del soplo cardíaco y evaluar su impacto en la función cardíaca.
Importancia de un diagnóstico temprano y seguimiento veterinario
Un diagnóstico temprano del soplo cardíaco en perros es fundamental para iniciar un tratamiento oportuno y adecuado, y para controlar la progresión de cualquier enfermedad subyacente. Además, un seguimiento veterinario regular es esencial para monitorear de cerca la evolución del soplo y la salud cardiovascular del perro.
El veterinario evaluará periódicamente la presencia y gravedad del soplo cardíaco, y realizará las pruebas necesarias para evaluar la función cardíaca y detectar posibles complicaciones. Basándose en los resultados de estos exámenes, el veterinario podrá ajustar el tratamiento y brindar recomendaciones específicas para garantizar el bienestar y la calidad de vida de tu mascota.
Tratamiento del soplo cardíaco en perros
Los soplos en sí no tienen tratamiento, si no que se trata la causa que lo produce y las consecuencias que tiene sobre nuestras mascotas en caso de que este sea patológico y requiera tratamiento.
Enfoque dependiendo de la causa subyacente y gravedad del soplo
El tratamiento del soplo cardíaco en perros está determinado por la causa subyacente y la gravedad de la condición. Una vez que se ha realizado el diagnóstico, el veterinario determinará el enfoque más adecuado para abordar el problema. En algunos casos, cuando el soplo es leve y no presenta síntomas, puede no ser necesario un tratamiento específico. Sin embargo, en situaciones más graves, como defectos cardíacos congénitos o enfermedades del corazón, pueden requerirse intervenciones adicionales.
Medicación, cambios en la alimentación y cuidados regulares
El tratamiento del soplo cardíaco en perros puede implicar el uso de medicamentos para controlar los síntomas y mejorar la función cardíaca. El veterinario puede recetar medicamentos como diuréticos para reducir la acumulación de líquido en los pulmones, y medicamentos para regular el ritmo cardíaco. Además de la medicación, es posible que se requieran cambios en la alimentación del perro, como una dieta baja en sal, para reducir la carga sobre el corazón. Asimismo, es importante proporcionar cuidados regulares al perro, incluyendo visitas veterinarias periódicas, seguimiento del estado de salud y revisiones de rutina.
Mejora de la calidad de vida y prolongación de la vida de nuestra mascota
El objetivo principal del tratamiento del soplo cardíaco en perros es mejorar la calidad de vida y prolongar la vida de nuestra mascota. Aunque esta condición puede ser preocupante, con el manejo adecuado y el seguimiento veterinario constante, muchos perros pueden llevar una vida plena y feliz. Es fundamental seguir las indicaciones del veterinario, administrar los medicamentos correctamente, y mantener un entorno saludable y libre de estrés para el perro. Con el tratamiento adecuado y un cuidado diligente, podemos brindarle a nuestra mascota la mejor calidad de vida posible a pesar del soplo cardíaco. El tratamiento del soplo cardíaco en perros debe ser personalizado y supervisado por un veterinario especializado en cardiología, ya que cada caso es único. Es importante seguir todas las recomendaciones y mantener una comunicación constante con el veterinario para asegurarnos de proporcionar el mejor cuidado posible a nuestro fiel amigo peludo.
¿Cuándo debe visitarse al veterinario?
Si sabes que tu perro padece un defecto cardíaco debes acudir de inmediato a un veterinario en caso de observar indicios de insuficiencia cardíaca como, por ejemplo, dificultades respiratorias, desfallecimientos o abultamiento abdominal.
Cuidados para un perro con un soplo en el corazón
Adicionalmente, podemos ayudar a nuestro perro con endocardiosis valvular crónica, u otra enfermedad cardíaca, con una serie de hábitos saludables, en lo que se refiere a su alimentación y cuidados:
- Mantener un peso óptimo, de acuerdo a su edad y raza.
- Paseos cortos con descansos regulares, preferiblemente en llano.
- Suprimir premios demasiado salados o comidas grasas que podamos estar dando regularmente (por ejemplo, cuando nuestro perro “desayuna, come y cena” con nosotros).
- Utilizar arnés y no collar. La tráquea puede desplazarse cuando el corazón se agranda por efecto de la insuficiencia valvular, y un arnés no comprime la zona del cuello.
- Revisiones cada 6 meses o cada año, según las pautas que nos indique nuestro veterinario.
¿Cuánto puede vivir un perro con un soplo en el corazón?
Con el tratamiento y los cuidados necesarios, un perro con un soplo en el corazón puede vivir los mismos años que un perro soplo. Por supuesto, hay excepciones, ya que aquí entra en juego la causa que origine el soplo.
Prevenir soplos en el corazón en los perros
No hay nada que podamos hacer para prevenir esta dolencia en concreto, pero si es importante vigilar periódicamente a los perros de ciertas razas.